Las vírgenes seglares no son monjas ni pertenecen a ninguna comunidad religiosa, más allá de colaborar intensamente en la vida parroquial. Están insertas en el mundo real, mantienen su trabajo y continúan con su día a día de forma discreta.
El Código de Derecho Canónico reconoce esta forma de vida dedicada a Jesucristo, que requiere una vida casta y la total renuncia al matrimonio para transmitir el Evangelio en la parroquia, su empleo, la familia y las amistades. Fuente: Diario El Mundo
- No son monjas, sino laicas que juran castidad para servir a la Iglesia
- El rito de consagración, del siglo II, simboliza su matrimonio con Cristo
- En la ceremonia van vestidas de blanco, con un velo, y reciben una alianza
- Las últimas tres vírgenes seglares consagradas en España son valencianas